El Atalaya Golf se compone de dos campos, el Atalaya Old Course y el Atalaya New Course. El primero de ellos fue diseñado por el campeón alemán Bernard von Limburger y cuenta con calles muy anchas y green elevados. Pasear entre golpe y golpe se convierte en una experiencia muy agradable gracias a las vistas que ofrece desde algunos puntos del campo de golf hacia la Sierra de la Concha. Estamos ante un campo de alta dificultad que se exigirá mucha destreza en el golpe, incluso para jugadores con buen hándicap.
Frente a este par 72 encontramos, dentro del mismo Atalaya Golf, un par 71 que recibe el nombre de Atalaya New Course. Un campo que destaca por sus greens rápidos y por calles anchas, pero a su vez onduladas, que complican el acomodamiento en los metros finales de algunos de los 18 hoyos de los que se compone este campo de golf.
Ambos campos se encuentran apoyados por un restaurante con muy buenas vistas que renueva su carta y menús hasta en tres ocasiones a lo largo del año, con el objetivo de adaptarse a los productos que son de mayor calidad en determinadas épocas del año.